Cada 19 de octubre se conmemora el Día Mundial de la lucha contra el Cáncer de Mama, con el objetivo de promover la prevención en mujeres, que accedan a controles, diagnósticos, tratamientos oportunos y efectivos. Este tipo de cáncer es una enfermedad que provoca que las células de la mama se multipliquen sin control.
Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), este tipo de cáncer es el más común y la segunda causa de muerte entre las mujeres de América Latina y El Caribe donde aproximadamente mueren 100.000 mujeres cada año. En el 2022, la Sociedad de Lucha Contra el Cáncer (SOLCA), en Ecuador señaló la enfermedad como la tercera causa de muerte de mujeres en el país.
Por ello, todos los años se realizan programas de información, consejería, como estrategia de captación de mujeres de 30 y 69 años de edad, para que participen de charlas informativas, consultas de planificación familiar, procedimientos preventivos y mamografías para detectar a tiempo el cáncer e iniciar con atenciones médicas de inmediato. La mayoría de las mujeres diagnosticadas con cáncer de mama en etapas iniciales (I y II), si reciben tratamiento, tienen un buen pronóstico, con tasas de supervivencia a 5 años del 80% al 90 %.
El desafío es reducir la mortalidad del cáncer de mama, en especial en ámbitos con escasos recursos económicos. El número de casos de cáncer en la Región de las Américas se estimó en 4 millones en 2020 y se proyecta que aumentará hasta los 6 millones en 2040.
La OPS trabaja con los países de América Latina para reducir 25% las muertes prematuras por enfermedades no transmisibles, entre ellas el cáncer, para 2025.
Para evitar el cáncer de mama recomiendan:
- Llevar una alimentación balanceada y alta en fibra, que incluya brócoli, acelgas, espinacas, setas, uva y papaya.
- Disminuir el consumo de azúcares y grasas.
- Disminuir el consumo de carnes rojas o embutidos.
- Practicar ejercicio habitualmente.
- Mantener un peso adecuado.
- Evitar el consumo de bebidas alcohólicas y tabaco.
- Realizar una autoexploración mamaria mensual a partir de los 20 años, de preferencia al quinto día de la menstruación.
- Solicitar una mastografía a partir de los 34 años, en caso de antecedentes familiares de la enfermedad.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) el cáncer es la principal causa de muerte en todo el mundo. Se calcula que aproximadamente un 40% de las muertes por cáncer podrían evitarse, modificando cinco factores de riesgo: obesidad, ingesta reducida de frutas y verduras, falta de actividad física, consumo de alcohol y de tabaco.
La mamografía es la única prueba o test para evaluar posibles problemas antes de que la enfermedad se manifieste, se realiza mediante rayos X para buscar signos de cáncer en etapas iniciales. Al detectarla de forma temprana, la tasa de supervivencia es mayor al 90%, por eso, el tamizaje debe mantenerse en mujeres sanas desde los 50 a 69 años a través de la mamografía, y repetirla cada dos años.
Los signos de alerta del cáncer de mama pueden ser distintos en cada persona o no presentarlos. Entre las más comunes se mencionan un bulto nuevo en la mama o la axila (debajo del brazo); aumento del grosor o hinchazón; irritación o hundimientos, cambio en el tamaño o la forma; dolor en cualquier parte de la mama, enrojecimiento, descamación o secreción del pezón. (I)