Las imágenes causaron alarmas durante el fin de semana en Estados Unidos, por el registro de miles de peces muertos en la costa del Golfo de Texas. Los peces fueron arrastrados a una playa en el otro extremo de Bryan Beach, cerca de la desembocadura del río Brazos.
Aunque no existe un reporte oficial, se presume que la muerte de los peces sería por la falta de oxígeno provocado por el agua cálida que no permite contener este elemento como lo hace el agua fría.
Funcionarios de la zona, consideran que las aguas poco profundas se calientan rápidamente lo que provoca que los peces queden atrapados y sufran hipoxia, un estado en el que los niveles de oxígeno son insuficientes, lo que provoca que los peces se comporten de forma errática, agotando sus niveles de oxígeno. (I)
